25 octubre 2007

Capitulo 5 “¿Presagio?”

No sé si fue la comida, no sé si fue la herida en mi cabeza, no sé si fue el duro golpe con la realidad, lo que si sé es que aquella tarde en cuanto la primera gota de lluvia toco la tierra yo tenía uno de los sueños más intranquilos de mi vida.

Me encontraba en ningún lado, en ningún tiempo y sin ningún sentido.

Me encontraba en un pedazo de papel en blanco, en un rincón olvidado de la mente.

Me encontraba solo y no quería estarlo.

Algo me hizo mirar a la derecha donde vi un gran desierto y entre las dunas apareció mi amor.

Como un súbito rayo Sofía se dejo ver, estaba hermosa, vestía el camisón blanco ese que le marcaba la figura de tal forma que parecía no llevar nada.

Tenía los ojos tristes y la mirada cansada.

Quise correr hacia ella, pero me frene sin razón, y al hacerlo me asintió con una sonrisa en la boca, me miro desde la lejanía y me hizo un gesto con la mano acompañado de unas palabras que no creo comprender por el momento.

_No vengas, solo encontraras oscuridad y muerte.

Entonces mira a mi izquierda, me sorprendí al ver a la doctora parada en la entrada en de un bosque mirándome fijo.

Mi sorpresa fue mayor aun, cuando vi que me hacia una señal parecida a la de Sofía pero ella me llamaba y decía.

_Joaquín ayúdame, no puedo volver a casa.

Yo gire a ver a mi esposa haciendo caso omiso de lo que la doctora decía, y esta vez Sofía me miraba feliz y me asintió nuevamente, luego se dio vuelta y camino lentamente al horizonte.

_Que hago? Grite.

Estaba literalmente entra la espada y la pared.

Corro hacia mi esposa o trato de ayudar a una desconocida??

De que muerte y oscuridad puede hablar, si junto a ella todo seria luz y vida.

Decidí correr hacia mi esposa, no me importaba su advertencia, solo quería tomarla de la mano y caminar juntos hacia el horizonte.

Pero al pisar la arena me desperté sobresaltado.

Baje a la cocina con la garganta seca y tome un vaso de agua.

Luego decidí tomar un baño reparador, deje abrir la ducha. El agua caliente al tocar la loza fría creo un vapor denso y blanco como si nubes bailaran dentro del cuarto.

Me deje hundir en el mar calido de mi bañera y mientras sonaba Peral Jam de fondo pude relajarme.

Aunque mi cuerpo estaba completamente calmo y sereno, dentro de mi cabeza se gestaba una revolución. Pensamientos chocaban contra deseos, fantasías contra realidades y los sentimientos de corazón eran el tan preciado botín de guerra…..

3 comentarios:

sbs dijo...

ya que nadie escribe me escribo yo........igual gracias a los 3 comentarios mas lindos del blog, gracias lu, bren y mary!!!!


ahh pausa para decir que este capitulo me gusto mucho...lo veo muy grafico....me siento alli

besos


sbs

Anónimo dijo...

Hola amore...
Qué lindo es encontrarnos en un mundo diferente y tranquilo como lo es el de la literatura, o delirios literarios diría más bien.
Es poco el tiempo que hace desde que nos conocimos pero sos un "adentrista" más en mi vida.
Suelo desaparecer, lo sé... pero estoy.
Te quiere,
Ann

Lucila dijo...

_No vengas, solo encontraras oscuridad y muerte

Eso no es amor verdadero?

no hablo mas, porq esa frase mereció una de mis lágrimas

Lu